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Cementerio de palmeras y vivero de picudos

Vertedero de palmeras. Más de 50 árboles talados tras sufrir los estragos del picudo rojo permanecen en el recinto de Las Bóvedas sin que nadie se preocupe por triturarlos para evitar la extensión de la plaga.

M.A.RIVES

Cementerio de palmeras infectadas por picudo rojo. Medio centenar de árboles que fueron talados en distintas zonas verdes de Almoradí tras haberse visto afectados por la plaga permanecen desde hace tres meses en el recinto de Las Bóvedas. Los ejemplares, que deberían de haber sido triturados para evitar que el insecto se extienda, amenazan la integridad del corredor verde del Segura a su paso por la ciudad y merman las tareas de fumigación que se llevan a cabo con las que todavía están sanas.

El grupo de Izquierda Unida (IU), que ha denunciado la situación y la amenaza de que continúe la extensión de la plaga, ha apuntado a que son los impagos del Consell para con la empresa Tragsa, encargada de la localización y eliminación de los ejemplares “enfermos”, los que han motivado que el picudo siga causando estragos en los parques y jardines de la ciudad. En este sentido, han subrayado que aunque es la Conselleria de Medio Ambiente la que debería tomar cartas en el asunto, debería de ser la concejalía del área del municipio la que se encargue de exigir el cumplimiento de los protocolos previstos en este sentido para atajar la plaga.

El concejal de la formación de de izquierdas José Mateo, consideró que el problema que vienen sufriendo las palmeras de la ciudad “es que no se trataron a tiempo” y que, aunque ahora las están fumigando con fitosanitarios, “muchas de ellas ya están enfermas y no se puede hacer nada para rescatarlas”.

Según los cálculos de Izquierda Unida, son más de un centenar las palmeras que ya han sido taladas en la ciudad, a razón de unas 30 en la plaza Cortes Valencianas, otra treintena en el polígono de Las Maromas, 20 más en la plaza Ciudad de Elche y al menos una decena en los alrededores del antiguo polideportivo. Cifra a la que habría que sumar todas las que han sido cortadas en terrenos y fincas de particulares.

José Mateo apuntó que lo más grave de la situación es que sólo la mitad de las palmeras que han sido arrancadas para evitar el avance de la plaga han sido trasladadas fuera del recinto de Las Bóvedas y, supuestamente, trituradas, mientras que el medio centenar restante continúa en el que se ha convertido ya en un pudridero de palmeras por el que campa a sus anchas el temido insecto.

“En estos momentos como es invierno los insectos de picudo se encuentran agazapados y apenas se mueven, pero cuando se registre un aumento de temperaturas el picudo seguirá extendiéndose por el corredor verde del Segura”, alertó el edil.

Desde el grupo de Izquierda Unida aseguran que han registrado en el Ayuntamiento de la ciudad, gobernado por el Partido Popular, varios escritos para instar al equipo de gobierno a que ataje de una vez el problema y exija al Gobierno Valenciano que retire los ejemplares infectados.

Las Bóvedas

El recinto municipal de Las Bóvedas fue creado a finales de la década de los 90 con fondos de la Unión Europea con el objetivo de acoger una casa de oficios en la que se puso en marcha un vivero municipal. José Mateo quiso recordar que en un principio se utilizaba para que los alumnos de estos cursos plantaran distintas especies de árboles que más tarde eran trasladados a las zonas verdes de la ciudad.

Premio Camon Business

Precisamente, un proyecto de la empresa Glen Biotech S.L., empresa de Base Tecnológica de la Universidad de Alicante, cuya finalidad es desarrollar soluciones innovadoras y sostenibles para problemas agrícolas y vinculados al sector paisajista ha ganado el premio Camon Business. “Phoemyc”, un hongo para el control biológico del picudo rojo, ha conseguido unos resultados excelentes en su aplicación en los ensayos de campo.

 

Diario “Informacion”, 20-12-11

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